Cap�tulo 8: Lo nuestro termin� sin haber comenzado

Esa noche cuando corr� a mi casa desde su auto, pensaba que le hab�a prometido que no llorar�a m�s. Con la servilleta que me escribi� guardada celosamente en el bolsillo, con el lacito puesto y los granos de caf� bien firmes en mi mano, entr� a casa aguantando las l�grimas. Como siempre, antes de cualquier cosa, entr� a mi habitaci�n y encend� el computador.
Tal como la fallida vez anterior en que no nos hablar�amos m�s, esper� est�pidamente que apareciera conectado en 30 minutos m�s, aproximadamente lo que demora de mi casa a la suya. Pero esta vez sab�a que no me hablar�a, ni yo pod�a hablarle: era yo la que le hab�a dicho que no. Como dijo el tan prodigiosamente: "por segunda vez, lo nuestro termin� sin haber comenzado".
Necesitaba evadirme, necesitaba olvidarlo, �c�mo lo hac�a! �si era todo lo que yo quer�a en la vida! Por MSN trat� de fingir normalidad, a nadie le contaba lo que me pasaba, excepto a un par de personas a las que les cont� por lo que estaba pasando e inevitablemente romp� en llanto otra vez.
Como siempre, esa noche me dorm� muy tarde. Esta vez era extra�o porque quer�a dormirme, quer�a olvidarme de todo. Pero no pod�a, no pod�a estar tranquila, no pod�a dejar de estar en el computador haciendo la guardia a alg�n post para saber c�mo estaba (aunque yo sab�a que �l no estaba bien, pero algo ten�a que saber). Yo sab�a que �l pod�a ver si yo hab�a visitado su blog, pero al fin qu� importaba, ya nada importaba, yo ya hab�a echado a perder todo (ahora s� que �l tambi�n hizo la guardia a mi blog).
La ma�ana siguiente fue horrorosa, porque quer�a despertar con el sonido especial que �l tiene en mi celular, pero ya hace horas que mi celular no sonaba, ni menos �l me llamar�a. No quer�a ir a clases, no quer�a nada, s�lo quedarme en la cama llor�ndolo. Hasta que decid� levantarme y deshacerme de toda evidencia de su persona, ya no pod�a hacerme m�s da�o, yo ya hab�a decidido: comenc� a borrar fotos de mi computador, aunque yo sab�a que estaban el el CD que me grab� el d�a en que nos besamos por primera vez, pero algo deb�a hacer, no pod�a quedarme as�. Pero no pude seguir, el lacito en mi cuello no pod�a sacarlo y los granos de caf� ya hab�an perfumado mi mochila. Por supuesto que esa ma�ana falt� a la primera clase que ten�a.
Me maquill� muy bien para discimular, pero nada pod�a esconderme: todos me preguntaban qu� me pasaba y asociaban de inmediato con mi ex pololo. Hace un tiempo ya que me cuesta fingir alegr�a, antes me era muy f�cil, pero ahora mi meta es no mentirme y esta vez as� fue. Mi respuesta a todos los "�qu� te pas�?" era "estoy triste".
Ese d�a, por esas cosas de la vida, tuve que pasar por muchos lugares donde hab�a estado con �l. Me sent�a tan sola, tan vac�a, ya quer�a buscarlo, pero deb�a ser coherente. Y as� me pas� pensando en �l, yendo contra mi ley de nunca decir "qu� hubiese pasado si...". Yo, cobardemente, lo estaba diciendo, estaba ah� pregunt�ndome qu� hubiese pasado si hubiese hecho caso omiso a mis trabas, qu� hubiese pasado, eso retumbaba en mi cabeza mientras me aferraba al lacito turqueza como un amuleto, para llamar su presencia, para saber que, alguna vez, alguien me dio lo que yo necesitaba y hab�a sido feliz s�lo por algunos instantes.
Y de vuelta a casa, y de vuelta a MSN, y de vuelta a mi mail, y de vuelta a su blog. No pude resistirme de dejarle un comentario, un "las cosas van a mejorar", �nimos y dem�s, algo que estaba imposibilitada de dar. A su vez, �l despu�s me dej� un comentario, cuando lo vi me salt� el coraz�n. Nuestra relaci�n volv�a a ser la de bloggers, sin que nadie de este mundillo supiera qu� pasaba con nosotros.
Y amaneci� otro d�a triste, en el que ten�a que llegar a las 8.30 y nunca llegu�, en el que el maquillaje se esmeraba en disfrazarme, en el que usaba el perfume que a �l le gustaba, en el que no soltaba mi lacito turquesa y en el que sacar un cuaderno de mi mochila significaba sentir el aroma testigo de nuestro idilio.
Lleg� la tarde y con ella la vuelta a casa y el respectivo encendido del computador. �l no estaba conectado y yo conversaba de mi situaci�n con uno de mis amigos con el que habl� de esto el d�a anterior. Mi amigo me dec�a que c�mo era posible que yo discriminara a alguien por no ser de mi religi�n, que me desconoc�a y que estaba yendo contra mis propias creencias. "Imag�nate t� del otro lado, �c�mo te sentir�as? �discriminada!" me dec�a furibundo. "Si quieres saber c�mo est�, entonces ll�malo de una vez, �qu� esperas para llamarlo!" segu�a arguyendo. Y comenz� a abrirme los ojos. Luego, habl� con la persona que m�s me conoce en este mundo: mi mam�. Ella no sab�a nada de esto, s�lo sab�a que yo sal�a con �l como pod�a ser con cualquier amigo. Y mi mam� me dijo que c�mo estaba dejando ir a quien me daba lo que yo necesitaba, que dejara ya de querer estar bien con "don Jeshu" y postergarme, porque �l quer�a que yo estuviera bien, �y cu�ndo fue pecado querer a alguien leg�timamente!
El bombardeo me dej� at�nita, �por Dios, qu� estaba haciendo! Hab�a pasado dos d�as horrorosos y hab�a hecho que �l los pasara tambi�n. Ten�a mi ser dividido en mente y coraz�n y los sentimientos comenzaban a arrebatarle los argumentos a mi cabeza.
De pronto, se elev� desde el costado inferior derecho del monitor de mi PC un cuadradito celeste con su nombre. Eso significaba que hab�a llegado a su casa, que si quer�a hablar era el momento. Mente y coraz�n, mente y coraz�n... deb�a decidir, al fin, quien ganaba esta pelea.

Saldos al d�a:

• ������S�!!!!!!!! �Un bronceadito playero! (�gracias mi amor, lo pas� muy bien!)
• El "libro de quejas" inaugurado: no le puse bloqueador en una franjita, con las consecuencias esperables (lo siento amorrrrrrrrrr buaaaaaaaaaa Te pondr� cremita de aloe vera �ya?)
• Un mail muy lindo con su respectiva respuesta (�Pame, gracias por tu amistad!)
• Una invitaci�n a almorzar muuuy buena, relato en Fauna Bloggera (Ceci, �top, top! muy buena la reuni�n de chicas, �se viene la fiestoca!)
• Last night I missed your "good night", today I dream with your "good morning"... specials tones are needed in my cellphone (and I love you, and I love your way that you love me!)

M�P